
Cuentan que las náyades eran ninfas de la mitología grecolatina, que vivían en ríos y lagos para depurar las aguas al emitir el dulce sonido de su cuerpo. Con similares pretensiones alza el afrocubanismo, desde Bayamo, Náyade Duany Palacio, en su nueva misión como presidenta de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) en Granma.
“Junto a mi padre, Armando Duany, uno los fundadores de la AHS y director del grupo folclórico YorubaMan, realizábamos encuentros en la institución, que paulatinamente descubrí.
“Con el apoyo de la actriz Lisbet González Tejeda, entonces presidenta de la organización, y de Ariel Hernández Chávez, director de la compañía Tiempo, de Arte Contemporáneo, me integré a la filial de música, quise descubrir el teatro, la literatura y el mundo habitado por personas dispuestas a disfrutar una plataforma juvenil de amor y fantasía.
“Nuestro grupo musical, en su mayoría integrado por mujeres de piel negra, comenzó a interactuar con otros proyectos religiosos y culturales, hasta encontrar el motor impulsor que hoy nos anima.
“YorubaMan, con el golpe profundo de los tambores batá, es asumido desde la mujer, aunque en la tradición Yoruba los tambores son instrumentos para hombres por el fundamento religioso que encierran.
“Como seres humanos, crecimos en el trabajo sociocultural comunitario, es el granito de arena aportado al arte y a la cultura.
“Mediante el proyecto Tokaché trabajamos, de igual manera, el peinado afro y el empleo adecuado de turbantes, no como tendencia de moda, simboliza rescatar la autodeterminación racial y la negritud como identidad, que nos permite enseñarles a las muchachas cómo llevar su cabello con orgullo.
“Granma muestra el mayor potencial creativo juvenil de los últimos años, somos continuidad de la intelectualidad que nos antecedió en el trabajo de la organización y la oportunidad para quienes se nos acercan.
“Como presidenta provincial de la AHS, recién electa, acepto el reto. Mi plataforma de trabajo es grupal y asumiré las demandas y preocupaciones de los asociados que buscan soluciones.
“En el mes de octubre tendrá lugar, en la capital cubana, el IV Congreso de la AHS. Será una transformación renacentista en medio de la crisis global que enfrenta el universo, otra ocasión para socializar ideas y edificar la organización que oxigenará nuestras venas”.
YorubaMan es el río musical de la AHS, por sus manantiales navega el silbido de Náyade, emergen la trova, la poesía, el teatro, la visualidad artística y el empoderamiento femenino de la cultura afro, que ahora rige el destino de las deidades de su reino.