
Actualmente allí se elabora pulpa ligera y concentrada de mango, y rodajas, segmentos, mermeladas y jugos de piña, destinados al mercado interno y al turismo, explicó Jorge González, administrador de la unidad.
También fabrica salsas, jugos y puré de tomate y guayaba, según la época de cosecha de esos cultivos, agregó el directivo.
En febrero pasado entró en funcionamiento la industria con los modernos equipos y le fue instalada una conductora de agua para favorecer el proceso industrial durante todo el año.
La inversión, valorada en más de seis millones de pesos, incluyó una línea aséptica, que permite obtener pulpa concentrada de mango, guayaba y tomate hasta un 30 por ciento.
Igualmente posee áreas de lavado, selección, deshuese de las frutas y vegetales, repasadores, concentradores, pasteurizadores y torre de enfriamiento, apuntó González.
La tecnología instalada permite una molida diaria de doce toneladas de frutas o vegetales, cifra que triplica la producción tradicional de la industria majagüense, que disponía de equipos con más de 60 años de explotación.
La modernización de la fábrica de conservas de Majagua contribuye a eliminar pérdidas de frutos en los campos, porque enfrenta los picos de cosecha y aumenta la producción de conservas destinadas a la población y eleva la calidad del surtido.