
Directivos y trabajadores de la Empresa Municipal Agroforestal Bartolomé Masó Márquez se aprestan para enfrentar la próxima cosecha cafetalera, con un enfoque renovado que busca optimizar las diferentes formas productivas y asegurar el cumplimiento de los planes establecidos.
Este año, la unidad ha diseñado un plan general basado en los resultados del programa de desarrollo cafetalero, que estima rendimientos superiores a 0.20 toneladas métricas por hectárea, precisó la ingeniera Noelsis Enrique Benítez, directora de la referida entidad cafetalera.
Con esto, dijo, se prevé un acopio de 177.03 toneladas métricas de café, lo que representa un incremento de 66.3 toneladas en comparación con la campaña anterior.
“Comenzamos a controlar las floraciones del café, observando resultados prometedores, en el caso del café arábico, se registró la primera floración en febrero, calificada como buena, seguida de otra el 5 de marzo, también con una evaluación positiva”.
“Esto sugiere que la recolección de café comenzará con una maduración esporádica a principios de agosto, aumentando significativamente hacia finales de octubre y noviembre. Por otro lado, la variedad robusta, mostró floraciones desde enero hasta febrero, con un pico notable el 14 de marzo, aunque su maduración se espera a partir de noviembre”.
Con miras a la cosecha, aseguró la dirigente, durante julio y agosto se continúa con el emplantillamiento de recolectores y otros trabajadores que se encargarán de diversas labores, como el beneficio del café y el cuidado cultural de las plantaciones.
“Además, se planea emplantillar al 100% de los animales de carga necesarios, dígase mulos, caballos, burros y yuntas de bueyes, para el trasiego del café desde los campos hasta las despulpadoras”.
La empresa cafetalera masoense, agregó, también está enfocada en la producción de artículos esenciales para la cosecha, incluyendo morales, aparejos, clavos y herraduras artesanales, sin embargo, el parque automotor estatal, compuesto por seis equipos, requiere neumáticos, baterías y otros accesorios para estar completamente operativo.
“Un desafío importante que se enfrentará durante la venidera cosecha está relacionado con las desfavorables condiciones de los caminos, aun cuando las brigadas locales están trabajando arduamente en el bacheo y drenaje de las rutas más complicadas para garantizar un acceso seguro durante la cosecha”.
“La reparación de los centros de beneficios de café húmedos es otra prioridad. La empresa está comprometida a realizar los mantenimientos necesarios tan pronto como lleguen los recursos, asegurando así un funcionamiento óptimo durante los picos de maduración”.
Con la maduración del café prevista para comenzar en septiembre, la Agroforestal creará una brigada de recogedores compuesta por 15 integrantes. Esta brigada apoyará a las bases productivas durante los picos de maduración, sobre todo donde haya déficit de mano de obra.
Para mejorar la organización de la cosecha, concluyó Noelsis, se realizarán las llamadas reuniones semanales de zafra a nivel de zonas, todos los miércoles a las 9:00 a.m. y la municipal todos los jueves a las 8:00 a.m. Además, se realizarán conciliaciones decenales con los administradores de despulpadoras sobre el comportamiento de la cosecha y comercialización del producto líder serrano.
Con la estrategia planteada la Empresa Agroforestal Bartolomé Masó Márquez está decidida a enfrentar la nueva cosecha con una planificación meticulosa y un compromiso firme hacia la eficiencia y la calidad en la producción cafetalera.