
Con la voluntad productiva de incorporarse a partir de julio a la exportación, un grupo de 12 obreros de la Empesa Filial de Torcido de Tabaco Manzanillo ejercita su habilidad y elabora los puros Mareva que se comercializarán en otras naciones.
Arael Gómez Pérez, uno de los fundadores de la fábrica Agustín Martín Veloz, hace honores a sus 25 años de trabajo entre las aromáticas hojas, mientras selecciona las lanceoladas láminas para la confección del tabaco de tripas largas de entrega Habano.

“Estas son hojas escogidas, con un tratamiento especial. Por su particularidad otorgan distinción a este tabaco que es redondo y se hace totalmente a mano; lo que le diferencia del nacional que se hace con relleno de picadura y se emplea una lona.
“Nosotros estamos evaluados como tabaqueros de exportación y retomamos este impulso productivo para seguir sumando beneficios económicos a la empresa y al país. Nos sentimos orgullosos de ser seleccionados para iniciar este importante compromiso”.
La chaveta, los dedos y la experiencia son los instrumentos con que conforman los cuerpos que rellenan los bonches o tablas moldes. Allí, en decenas, son prensados para que adquieran la forma, pierdan las costuras y luego se les enrolla en la capa del acabado final.
Robiel Salazar y Luis Vitorte, con más de tres décadas en el torcido, le imprimen ritmo al empeño que permite a la sección Agustín Martín Veloz superar los 18 mil tabacos para exportación en apenas unos meses.

Estas cifras, incorporadas a los resultados del desempeño en los meses transcurridos del actual año, permiten a la fábrica marchar con un 107 por ciento de cumplimiento y realizar un considerable aporte al millón 936 mil 235 de tabacos torcidos que acumula la Empresa Filial manzanillera.
“La labor de los 292 trabajadores es esforzada, y a pesar de las circunstancias electroenergéticas estamos buscando alternativas para alcanzar los planes productivos, afectados por el envejecimiento y jubilación de la fuerza laboral en la sección Paquito Rosales Benítez, comenta Yanet Tornés Díaz, directora de la Filial.
“Ya estamos capacitando allí a un grupo de obreros que aportan al plan, mientras en la otra unidad se incorporó el trabajo en sábados alternos. Disponemos de la materia prima y no nos detenemos, porque la meta es que el trabajador pueda torcer y hacer un buen tabaco”.
Los 292 tabacaleros de Manzanillo conmemoran este jueves 29 de mayo su día con la disposición de honrar al capitán de la clase obrera, Lázaro Peña, en conmemoración de los 114 años de su natalicio.
La joven de 31 años Diannys Verdecia Rodríguez, parte de la fuerza femenina que representa el 80 por ciento de los trabajadores de la Filial de Torcido en el segundo municipio en importancia de la provincia de Granma, afirma que “cumplir la norma de 170 tabacos diarios es un reto que en sólo tres meses ya cumplo con agilidad y responsabilidad”.
A las vitolas de breva y crema que se comercializan con el nombre Moya, en breve incorporará Manzanillo la Mareva, y con esta se añadirá aroma del Guacanayabo al puro cubano que llegará a otras partes del mundo.