
Aumentos de salarios y pensiones, ingreso mínimo garantizado, reducción del horario de trabajo en correspondencia con el salario, abolición de la ley de reforma laboral, salud y seguridad en el puesto de labor, mayores inversiones públicas para enfrentar el desempleo, revisión del sistema de pensiones, son algunas de las exigencias.
Los organizadores de la huelga se pronuncian además por el derecho a la representación sindical con elecciones libres, defensa del derecho a huelga y manifestaciones, contra la guerra y los gastos militares y la eliminación de las desigualdades salariales, sociales, económicas y de género.
En Roma, la suspensión de actividades afecta el funcionamiento del tren subterráneo, tranvías, autobuses locales e interurbanos y trenes de cercanía, con horarios de excepción hasta las 08:30, hora local, y entre las 17:00 y las 20:00.
El paro incluye también a guarderías infantiles, escuelas, universidades, centros de investigación y las oficinas del registro civil y otras dependencias de la administración pública, en la capital del país.