
Bajo la mirada cómplice de la luna, que en el centro del cielo mostraba solo la mitad de su cara, 25 niños vestidos de verdeolivo reeditaron hoy, de manera simbólica, el asalto al cuartel Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo, realizado el 26 de julio de 1953 por un grupo de revolucionarios.
La rememoración fue a las 5.15 de la mañana, la misma hora en que se produjo el hecho histórico, hace 63 años, protagonizado por 25 jóvenes que compartían los ideales de Fidel Castro Ruz, de luchar para revertir la situación entonces existente en Cuba, debido a la tiranía de Fulgencio Batista.
Desplegadas en la parte frontal de la antigua instalación castrense, ahora parque-museo Ñico López, estaban desplegadas la bandera Cubana y la del 26 de Julio. Frente a ellas, artistas locales declamaron poemas e interpretaron canciones patrióticas.

Con un fuerte ¡PRESENTE!, respondieron las cientos de personas congregadas en el exterior de la instalación, al mencionarse los nombres de quienes intentaron tomarla en aquella ocasión, pero les fue imposible al fallar el factor sorpresa.
Simultáneamente con el Carlos Manuel de Céspedes, el 26 de julio de 1953 fue asaltado el cuartel Moncada, en Santiago de Cuba, por otro grupo de revolucionarios, encabezados por Fidel Castro Ruz, acción que militarmente tampoco tuvo éxito, pero demostró que había fuerzas vivas en el país, las mismas que conquistaron el triunfo el primero de enero de 1959.
A la reedición del asalto al antiguo cuartel bayamés asistieron Federico Hernández Hernández y Manuel Santiago Sobrino Martínez, primer secretario del Partido Comunista de Cuba, en Granma, y presidente de la Asamblea provincial del Poder Popular, respectivamente, y otros dirigentes.
Gelkis Rosales del Toro, primer secretario en funciones de la Unión de Jóvenes Comunistas de Cuba en la provincia de Granma, en las palabras centrales de la conmemoración proclamó que para los cubanos en general, y las nuevas generaciones en particular, “el presente es de lucha y el futuro es nuestro.”