Leonel Brizuela Castillo es un manzanillero de 31 años que, con entusiasmo, da el paso al frente ante cada tarea consciente de lo que su aporte significa en la construcción del socialismo en Cuba.
Recientemente entrevistado, mientras asistía como delegado a la Asamblea XII Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), contagió el ambiente con su energía y puso en sus palabras pensamiento y corazón, como un hombre que sabe lo que quiere y se prepara para alcanzarlo.
Nacido un 4 de abril, piensa que la fecha lo consagró para ser, de por vida, un joven comprometido con su patria. Su inclinación hacia los temas políticos le acompaña desde su infancia, tanto es así que entre sus juegos estaba el realizar sus propias tribunas abiertas.
De pionero, era el más dispuesto para participar en matutinos y actividades políticas, tuvo, además, la dicha de participar en la primera tribuna abierta que el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz realizara en Manzanillo, en el año 2000.
Siempre le gustó estudiar, sobre todo, le atrajo el mundo de la Geografía, carrera que estudia, cursa el cuarto año. Su familia influyó mucho en su educación y desarrollo, inculcando desde su vida en el campo, los valores patrióticos.
Conserva con mucho amor un periódico del año 1995, cuando el Comité de Defensa de la Revolución (CDR), al que pertenecían su padres, ganó el primer lugar a nivel provincial.
Aunque quiso ser locutor y cantante, la hipoacusia moderada que le diagnosticaron a los 11 años, no le permitió desarrollar sus sueños, y a pesar de las limitaciones originadas por el padecimiento, dio todo de sí en cada consigna gritada, en cada nota del Himno Nacional, en cada discurso, “siempre he sido revolucionario”, afirma, dando continuidad al legado de su familia.
Amante de la música cubana, es fiel oyente de cantantes, como Haila María Mompié y de Los Van Van, y sumado a esto se le reconoce como un ágil bailador. Cuando habló de deportes, dijo que prefería el ciclismo aunque era un buen deportista en general. Entre sus lecturas, citó a Shakespeare como uno de los autores que le ha enseñado a amar la literatura.
Sin dejar de disfrutar de otros géneros cinematográficos, como la comedia, prefiere el cine cubano, y entre los filmes que más admira se encuentra Fresa y chocolate, de Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío.
En su mirada, es evidente la satisfacción de haber sido secretario de la UJC en la cooperativa de créditos y servicios Frank País García, donde dio sus primeros pasos y aportó reconocimientos al comité de base de la institución.
Trabajador y fiel seguidor de las ideas revolucionarias, tiene como paradigmas al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz y al Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Actualmente, trabaja como Normador en la cooperativa de producción agropecuaria, Osmar Rivero Fonseca, y es secretario de la UJC de su comité de base, el cual revitalizó mediante cursos de dirección y reserva de cuadros con la Organización Superior de Dirección para la Agroindustria Azucarera.
Este joven entusiasta logró que todos sus militantes se prepararan en el curso de Dirección y gestión empresarial con el objetivo de preparar personal en la base productiva.
Audaz delegado de la circunscripción 90, Brizuela Castillo se enfrenta a los diferentes problemas sociales con ánimo y optimismo, buscando siempre la mejor alternativa para resolverlos.
Trabaja incansablemente para aportar su granito de arena y, atemperado a los tiempos, sabe que se puede hacer más y toma acciones al respecto desde sus diferentes puestos de trabajo.
“No es hora de dividirnos, ni restarnos, es hora de unirnos y de que en conjunto podamos buscar todas las salidas y soluciones posibles”.
Con evidente convicción, el manzanillero expresó que daría todo de él hasta sus últimos días y comenta que aunque tenga preparación ideológica, considera que aún le falta más por mejorar. Emocionado declara que es un servidor de este país, sus objetivos y su trabajo siempre estarán en pro de dar ideas, para llevar adelante la Revolución.