
Suelen andar más sonrientes desde la celebración del Congreso internacional Universidad 2016, del 15 al 19 de febrero, en La Habana. Suman 25 y laboran en el Departamento de desarrollo de softwares, aunque 13 radican en la sede Blas Roca Calderío y 12 en la central, en Peralejo, Bayamo, todos de la Universidad de Granma (UdG).
En el evento, su exposición de softwares educativos y juegos didácticos, presentada en el stand de Tecnología Educativa, de la UdG, despertó el interés de profesionales de otros países, con propósitos de adquirir y desarrollar recursos de ese tipo.
Tres cartas de intención, firmadas por Narcy Bueno Figueras, rectora de esa casa de altos estudios, y personalidades de México, Argentina y Nicaragua, conforman el botín conquistado en la cita, primer paso hacia la concreción de contratos de compra.
Además, especialistas de República Dominicana, Mozambique y Los Ángeles, en Estados Unidos, también manifestaron pretensiones, y se llevaron parte de la propaganda y la trayectoria del departamento.
Rafael Isidro Remón Mecías, programador y uno de los participantes, cuenta que abarcaron un pequeño espacio en el Palacio de Convenciones, reservado con anterioridad, y allí plantaron bandera:
“Ambientamos aquello con identidad visual, creada por nosotros. Ubicamos computadoras, un televisor de 32 pulgadas, y proyectamos los productos. Muchos se acercaban”, expresa con satisfacción.
Añade que el imán con mayor potencia para atraer a las personas consistió en aplicaciones educativas para móviles, proyecto en el que más trabajan actualmente, por la rápida expansión de esos dispositivos, en especial entre los jóvenes.
César Infante Carbó, licenciado en Matemática y Computación y otro de los asistentes, refiere que fue positivo: “Confirmamos la calidad de nuestros productos, y laboramos con más motivación”.
PASOS HACIA EL PRESENTE
El grupo de desarrollo de ese tipo de materiales informáticos se instituyó en 1997, en la actual sede Blas Roca.
Remón Mecías rememora que la buena aceptación de las primeras creaciones, dirigidas, sobre todo, a la Enseñanza Especial, confirmó la pertinencia de fomentar la labor. Luego, recibieron otras denominaciones, como centro de estudios y departamento. Ahora confeccionan para públicos más diversos, y en su currículo aparecen contribuciones a colecciones, empleadas a nivel nacional, incluida Multisaber, El navegante y Futuro.
Los granmenses acumulan más experiencia, junto a los de La Habana, Camagüey, Holguín y Villa Clara.
En el 2003, por indicación del Ministerio de Educación, surgió uno en cada Instituto Pedagógico.
La integración de las universidades, a partir del inicio del presente curso escolar, provocó la desaparición de varios con pocos resultados en otras provincias.
Los integrantes del de Granma aseguran que el nuevo proceso los fortalece como equipo creativo, por la unión con otros colegas de la sede de Peralejo, quienes tienen práctica en el desarrollo de softwares para empresas.
Yennier Joaquín Díaz Núñez, al frente de los residentes en Bayamo, refiere el buen ambiente: “Nos complementamos bien, cada uno aporta sus fortalezas, y definimos líneas de trabajo”.
Explica que, en estos momentos, laboran en proyectos para favorecer el flujo de información dentro de la UdG, en especial para gestionar, de mejor manera, los procesos y facilitar la toma de decisiones.
Los demás muchachos, en Manzanillo, siguen enfrascados en otros materiales educativos, con la ventaja de contar allí con las carreras de perfil pedagógico, lo cual favorece la selección y confección de los contenidos.
Apoyados por profesores de la institución, los guionistas elaboran. Luego, los diseñadores aportan la parte gráfica, con la mayor creatividad posible, y los programadores lo unen.
Al momento de estas entrevistas ultimaban detalles para el Congreso internacional de Informática, que concluyó el 18 de marzo en el Palacio de Convenciones y su recinto ferial, Pabexpo.