
Para la Diputada a la Asamblea Nacional Iris Betancourt Téllez, el Código de las Familias cumple con el mandato constitucional de otorgar derechos a todas las personas, con preferencia e intencionalidad hacia quienes están en un estado de vulnerabilidad.
“En el Código de las Familias hay un reconocimiento legal a la forma de organización familiar que la propia sociedad cubana ha creado durante años, o sea, el Código no crea familias, sino que las visualiza en su entramado legal.
“Considero que da salida a los conflictos familiares que existen hoy en nuestra sociedad y deja una cobertura para los posibles conflictos de futuro, lo cual lo convierte en un código para hoy y para mañana”, apuntó la también, delegada territorial del Ministertio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) en Granma.
Betancourt Téllez insistió en que el Código refleja nuestros intereses, nuestros sueños y aspiraciones: “Es un Código para todos, que no niega derecho a nadie y que más bien otorga derechos a quienes nunca lo habían tenido, por eso es un Código democrático, inclusivo y moderno.
“Quizás algunas ideas parezcan demasiado avanzadas para algunos sectores de nuestra sociedad, pero en una norma legal, como es lógico, no pueden aparecer todos los deseos y aspiraciones individuales, pero sí los de la mayoría de la sociedad.
“Los más importantes es que es un reflejo de lo que nosotros necesitamos para ser una sociedad mucho más plena, más feliz, inclusiva y democrática. Mi exhortación es, a que este 25 de septiembre, cada cual asista a votar y haga uso de este derecho constitucional y soberano que no debemos desperdiciar”.