Caracas, – Un tercer barco con más de siete mil 110 toneladas de ayuda humanitaria zarpó de Venezuela hacia Cuba para resarcir los cuantiosos daños materiales provocados por el huracán Melissa que a finales de octubre pasado impactó en el oriente de esa isla.

El buque del ALBA “Manuel Gual” partió del puerto internacional de La Guaira, en el estado homónimo, norte, con 76 contenedores de alimentos, retroexcavadoras, insumos para la recuperación de la vivienda y vialidad, declaró a la prensa el secretario ejecutivo del ALBA-TCP, Rander Peña.

“Debe saber el pueblo santiaguero y cada uno de los hermanos cubanos que Venezuela y los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) están juntos para poder lograr la restitución” en los territorios afectados, declaró.

El viceministro para América Latina de la Cancillería comentó que el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, está en contacto permanente con el equipo de expertos venezolanos enviado para contribuir a la restitución del tendido eléctrico.

Afirmó que seguirá llegando todo tipo de ayuda “siempre que lo necesite el hermano pueblo de Cuba”.

Peña destacó que las acciones dentro del ALBA-TCP son siempre concretas y apuntó que si un pueblo o un país del bloque de integración latinoamericano y caribeño “requiere algún tipo de apoyo o de asistencia, vamos a estar para brindar esa asistencia y ayuda”.

Expresó que este barco del ALBA en las últimas semanas llevó más de 12 mil toneladas de alimentos y ayuda de todo tipo.

Este es el cuarto envió que la República Bolivariana despachó a Cuba después que Melissa penetró el 29 de octubre con categoría tres de la escala Saffir-Simpson a territorio cubano.

El fenómeno meteorológico golpeó con fuerza las provincias de Santiago de Cuba, Las Tunas, Holguín, Granma y Guantánamo, donde provocó cuantiosos daños materiales en la infraestructura eléctrica, habitacional y de la agricultura.

Los datos oficiales cifraron en 76 mil 689 las viviendas afectadas, de ellas cuatro mil 743 derrumbes totales, mientras miles de hectáreas de cultivos fueron arrasadas, al igual que cientos de kilómetros de viales y de tendido eléctrico.

Venezuela mandó un primer envío de ayuda humanitaria con 26 toneladas vía aérea al día siguiente del paso del huracán; el 8 de noviembre el barco del ALBA transportó cinco mil toneladas de alimentos, medicinas, enseres, además de una brigada de trabajadores eléctricos para contribuir a resarcir los daños.

El 10 de noviembre una tercera acción de solidaridad con Cuba se materializó con el envío de 22 especialistas venezolanos de la rama eléctrica, transporte y obras públicas con la misión de reforzar los equipos de trabajo y realizar diagnóstico, al frente del cual se encuentra el viceministro de Obras Públicas Domiciano Graterol.

Ese mismo día en la tarde noche partió el segundo barco con poco más de dos mil 500 toneladas de ayuda humanitaria, que en su totalidad suman más 12 mil entre alimentos, enseres, colchones, medicamentos, materiales de la construcción, insumos eléctricos, juguetes, entre otros.