Nació en Purialón, El Jigüe, pintoresco asentamiento de la serranía santiaguera; a los cinco años de edad se trasladó a Bayamo en compañía de su padre, vinculándose a la declamación de poemas y a un grupo de aficionados en la primaria Francisco Chong Maceo.

Terminando el duodécimogrado, sin permiso de sus padres y desconociendo dónde quedaba la escuela de arte de El Yarey, fue y formalizó las pruebas:

-Tranquilo, que aprobaste, espera el telegrama, le informó el jefe del departamento de teatro, así comenzó su historia.

“Primero llegó la carrera de Medicina Legal, septiembre avanzaba y me incorporé a la filial, apenas iniciadas las clases recibí el aviso ansiado, dejé la Medicina y me fui por el arte.

“Me gradué en 1989 y cumplí el servicio social en Río Cauto, donde permanecí tres años en la secundaria de Guamo, allí formé un grupo de teatro con títeres, montamos un cuento ruso llamado Pedro y el lobo, y participamos en varios festivales de aficionados con excelentes resultados.

“En una de mis visitas a Bayamo, llegué hasta el Parque-museo Ñico López, otrora lugar de ensayos de Andante, luego de saludarlos, la propuesta de Juan González Fiffe, su director, me paralizó:

-¿Quieres ir con nosotros a la Cruzada teatral de Guantánamo?

“Sin pensarlo mucho partí a Río Cauto, pedí el permiso correspondiente, y me fui al evento, me quedé con Andante”.

TEATRO ANDANTE, FAMILIAR EN EL ARTE

 “Este colectivo marcó un espacio vital en mi carrera, me enseñó a ser mejor en todos los sentidos, aprendí a tocar el tres… y a Fiffe agradezco mi formación ética y profesional, que me posibilitó incursionar como músico fundador del trío Los Audaces y que ahora, de otra manera, prosigo con Arturo Jorge y su cuarteto Tradición”.

CONGRATULACIONES

“Tengo la dicha de ser el actor de las artes escénicas más premiado de Granma: Máscara de Caoba de actuación, Premio Barrio Cuento, Pequeño formato, dos Caricato… en fin, reconocimientos importantísimos del teatro cubano.

“Junto al colectivo he recorrido la isla, de San Antonio a Maisí, y actuado en todos los festivales de Cuba y sus principales plazas: Guiñol nacional, la Sala Avellaneda, el Mella, Bertolt Brecht…, también viajé a Colombia, Dinamarca y a Venezuela”.

LA ANÉCDOTA

“Realizábamos una gira semanal por Tucaní, en el Estado venezolano de Mérida, coincidiendo con la fiesta patronal, cuando el Gobernador se nos acercó y dijo:

-Hoy tienen concierto en la Plaza Mayor de la iglesia.

“Pensamos tocar dos o tres temas a la forma de Andante, pero las miles de personas congregadas y la tecnología de punta dispuesta a nuestro favor, nos cambió el rumbo y les manifesté a las cantantes:

-Péguense al micrófono y canten sin miedo, pero si alguna desafina, aléjese y empate la canción en el camino.

“Comenzamos con el Son de la loma, el público se alborotó, bailó, nos aplaudían constantemente y fue tal el nerviosismo que me era imposible tocar parado”.

VARIANTES EMPRENDEDORAS

“El Teatro de Ilusiones Libres (TIL), con el mago Rey, me ofrece otras posibilidades expresivas, cuatro personas llevamos a escena un espectáculo titiritero de pequeño formato, con magia y música, que pondremos a disposición del público cuando pase la pandemia.

“Soy profesor de la Academia profesional de arte Manuel Muñoz Cedeño, en el nuevo perfil de teatro de títeres o animación de figuras e imparto actuación, junto a González Fiffe, asignaturas que también disfruto plenamente”.

PREMONICIONES

Alguien dijo que las cualidades son las cicatrices del destino y no hay nada más cierto, Celso Portales Tamayo quedó marcado de por vida como músico y buen titiritero.