La empresa cárnica de Granma garantiza con ingentes esfuerzos la alimentación del personal atendido por la Covid-19 y la canasta familiar.

Roger Diego Fernádez Bodaño, su director, comentó a La Demajagua que el Ministerio de la Industria Alimentaria (Minal) tiene la primer gran misión que es asegurar la canasta familiar normada en la que participan fundamentalmente la industria láctea, cárnica, conservas con la compota; la pesca con las dietas médicas, la industria alimentaria con pan y fideos, lo cual implica producir grandes volúmenes teniendo en cuenta que Granma es la cuarta provincia con mayor número de habitantes del país.

“Hemos enfrentado el proceso de atención a la pandemia, un número que a veces no asociamos al parte que el doctor Durán ofrece todos los días, con lo que implica más allá del número de evacuados y que en Granma en ocasiones ronda el orden de los dos mil en las diferentes categorías que se establecen, y los cuales tienen un ciclo de desayuno, merienda, almuerzo, merienda, comida y merienda, que debemos asegurar.

“Pero hay un número de personal asociado al trabajo con estos enfermos de Covid-19, o sospechosos, que en la práctica casi duplican esta cifra, equipos médicos, transporte dedicado al traslado de muestras, la gestión de aseos, temas logísticos de la alimentación que deben ser respaldados con alimentación y en la cual el Minal tiene un peso importante.

“Por ejemplo, la industria cárnica destinó a los pacientes de Covid-19, en el mes de julio, 1,4 toneladas de carne de res, seis de carne en conserva; 16 de pollo; seis de masa de croqueta, nueve de vísceras y 1,6 de cerdo.

“Esto constituyen unas 25 o 30 toneladas de productos cárnicos, un consumo superior al de las escuelas internas, círculos infantiles y universidades, que reciben de conjunto  18 toneladas de diversos productos”, aclaró el también coordinador del Minal en Granma.

La industria cárnica asegura la atención a hospitales y centros de asislamiento y personal asociado a la Covid-19 en medio de complejidades con la entrega de ganado porcino para generar embutidos y otros derivados.

Tampoco ha escapado a las afectaciones derivadas del recrudecimiento del bloqueo económico impuesto por Estados Unidos a Cuba, lo cual obstaculiza la importación de harina de trigo, imprescindible en la elaboración de otros surtidos que deben ser generados a partir de extensores de harina de arroz preferentemente.