Carretas tiradas por bueyes, cargadas de plátano-vianda –también llamado macho o tres cuartos-, salen cada cierto tiempo, rumbo a los mercados, de las áreas de la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) El Cuchillo, en el municipio de Media Luna, perteneciente a la provincia de Granma, Cuba.
Para muchos cubanos esa es la vianda por excelencia y es muy demandada.
Los cosechados en dicha UBPC son hermosos, de color verde intenso, gruesos y no pocos de unos 12 centímetros de longitud, y al madurar saben riquísimos, por su dulzura, lo mismo crudos que fritos.
Los 79 integrantes, de ellos cinco mujeres, de esa base productiva, están distribuidos en siete fincas que abarcan en conjunto 176 hectáreas (ha), de las cuales 133 se encuentran bajo riego.
En ellas producen, además de plátano-vianda, plátano burro –conocido, además, como fongo y bungo-, boniato, yuca, malanga, frijol maíz, tomate y en las guardarrayas, coco y mango.
El salario promedio mensual de esos cooperativistas se aproxima a los 700 pesos y debe aumentar en lo adelante, con la diversificación de su quehacer.
A lograrlo contribuirá, dice Alexis Meriño Alarcón, administrador de la referida UBPC, la creación de un módulo pecuario para criar cerdos, ovinos y caprinos, y de una mini industria para para elaborar conservas con restos de cosechas, por ejemplo, tomates verdes pequeños, y de mango y coco.
De septiembre a diciembre de 2017, esos cooperativistas medialuneros entregaron mensualmente, para comercializar, de 600 a 700 quintales de productos agrícolas y su propósito es aumentar en este año 2018 esas cifras de alimentos para la población, lo que repercutirá, por supuesto, de manera positiva, en sus bolsillos.